La naturalidad y el desparpajo de Lucía Berlín (1936-2004)
impregnan los 77 relatos que escribió a lo largo de su intensa vida y que no
conocieron la distribución editorial hasta más de una década después de su muerte con dos inolvidables libros de relatos: A Manual for cleaning women (2015) y Evening in Paradise (2018)
Tal y como comenta Lydia Davis en su magnífico prólogo a la edición del Manual para mujeres de la limpieza, Lucía Berlín ya escribió auto ficción mucho antes de
que esta se pusiese de moda, exagerando de forma divertida y vivaz en sus relatos
todo aquello que le ocurría, fuera o no verdad, con una magia y una naturalidad
que enganchan desde su divertida cercanía. Es un auténtico goce sumergirse en
estos relatos, máxime cuando además se conocen detalles de la sorprendente vida de la
escritora: la vasta geografía de sus múltiples residencias (Alaska, El Paso,
Santiago de Chile, México, Nueva York, Colorado, Los Ángeles), sus tres maridos
(el primero escultor, los dos últimos músicos de jazz, el último, drogadicto) o los variopintos trabajos que ejerció para poder mantener a sus cuatro hijos.
Vivió a su aire, de una
forma intensa y sorprendente, una madre que contaba historias a sus hijos antes de irse a
la cama, que añoraba profundamente el afecto inexistente en la relación con su propia
madre alcohólica, a la que parecía incluso molestarle su presencia, junto a la de sus dos hermanas, y que en el breve espacio de tiempo en el que pudo trabajar como profesora universitaria, enamoraba a sus alumnos/as con su particular carisma. Lucía nos
proporciona auténtico deleite desde el vertiginoso ritmo de su prosa, desde la sorpresa
continua e inesperada.
Aunque la celebremos tarde, ella fue tan auténtica como Raymond Carver. Nos aturde con su peculiar prosa y con su perturbadora y felina intuición. Desde la lucidez de sus trepidantes relatos, nos recuerda de continuo la necesidad de celebrar la
vida con fruición, hasta el último momento, a pesar de la botella de oxígeno, a
pesar del cáncer, a pesar de todo.
Para que os vaya enganchando esta maravillosa ama de casa con poderes de observación e irresistible verbo, os propongo dos estupendos relatos: Angel's Laundromat y Cherry Blossoms
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